Bea Aragón
24 de octubre a las 11:08 a.m.
@bearagonm Twitter

Tras unas semanas pensándolo me he decidido a compartir públicamente mi excedencia (renuncia): ya no trabajo en atención primaria, yo tampoco puedo más. 1/22

@ClaraBenedicto contaba muy bien el malestar que tenemos muchas al no reconocer ni reconocernos en nuestro trabajo. Y yo me siento totalmente representada en sus palabras. 2/22

Hice la especialidad de medicina de familia xq quería trabajar en los barrios, con la gente, acompañarles en sus procesos de salud/enfermedad. Durante la residencia descubrí la potencialidad de una atención primaria fuerte para mejorar la salud y disminuir las desigualdades. 3/22

Desde que acabé la residencia en 2007 he trabajado en la unidad de Atención Primaria de Cañada Real y he ido viendo como iban empeorando las condiciones: nosotras somos una unidad de apoyo que dependemos de un centro de salud que se ha saturando con los años. 4/22

Nuestro objetivo es hacer de puente entre la gente que tiene más dificultades de acceso y el sistema sanitario. Facilitamos en casos complejos que puedan tener una atención adecuada a su contexto acompañando y mediando. 5/22

No tenemos un cupo propio; nos desplazamos en furgoneta y vemos a la población de Cañada con dificultades de acceso al centro de salud: cada vez que disminuye la accesibilidad al sistema sanitario aumenta el trabajo “rescatando” a los q quedan fuera. 6/22

(Ejemplo histórico: cuando se aprobó el RD 16/2012 de exclusión sanitaria, nuestro trabajo aumentó tanto atendiendo a la gente que se quedaba fuera como buscando vías administrativas para que consiguieran la tarjeta sanitaria). 7/22

En la primera ola con el “cierre” de la atención primaria y hospitalaria aumentó nuestro trabajo, conocimos gente q habitualmente acudía al centro y q ahora no podía y aumentaron las consultas sociales. 8/22

Además, al estar cerrados servicios sociales y ofic. seguridad social la gente nos pedía q les ayudáramos con trámites q les eran imposibles. Todo esto a costa de añadir 1 hora diaria de trabajo extra y dejando cosas pendientes. Así durante meses. 9/22

Cuando acabó el estado de alarma empezamos a recuperar las cosas que habían quedado postergadas y tuvimos cierto alivio, ya que los pacientes volvieron mas o menos a sus centros (los que accedían previamente). 10/22

Seguíamos teniendo muchísima consultas de cuestiones de servicios sociales y seguridad social: la tramitación del IMV se ha hecho con las oficinas cerradas y la gente pedía ayuda para los trámites. Esto consume tiempo.

Y entonces empezaron a aumentar los casos y llegó la segunda ola. Y prácticamente de una semana a otra nos convertimos en un equipo de rastreo de salud pública. Durante varias semanas sólo hemos hecho estudios de contactos… Las cosas indemorables rápido y mal. 12/22

En el equipo no hemos dejado de trabajar presencialmente y el teléfono lo usamos para resolver problemas menores y como contacto. Llevábamos haciéndolo así años y nos funcionaba bien. 13/22

En las ultimas semanas que trabajé ya había personas que no conseguían contactar por teléfono con nosotras, algunos días más de 200 llamadas, eso mientras estamos viendo presencialmente. 14/22

El foco ha estado en coronavirus, descuidando no solo la atención clínica sino el acompañamiento y mediación en casos complejos. 15/22

Y para mí esta situación es la gota que colma el vaso, me veo haciendo PCRs cuyos resultados tardan 10 días, que cuando llegan son innecesarios. Con barreras para el aislamiento y dificultad para acceder a los recursos institucionales. 16/22

Me siento parte de un paripé que no sirve para nada. Y me enfado, mucho, y pierdo la paciencia, a veces con los pacientes, que acaban pagando el pato. 17/22

Llevamos desde marzo en situación de excepcionalidad, dando prioridad al Covid en primaria y haciendo mal y rápido en el mejor de los casos todo lo no-Covid. 8 meses de excepcionalidad no pueden convertirse en rutina si queremos que la primaria siga teniendo sentido. 18/22

Y van pasando x delante de mis ojos todas las cosas q he pasado para seguir atendiendo durante estos años: falta de adecuación de la furgoneta, docencia no remunerada fuera de horario…y conforme las veía se me iba el entusiasmo de mejorar el sistema desde dentro. 19/22

He tomado la decisión de parar con muchas dudas y ambivalencia. A corto plazo no veo otra salida para no quemarme del todo. 20/22

@ApRenuncio me ha ayudado a dar legitimidad a mi necesidad, a sentir que no estaba sola y a colectivizar el malestar para intentar cambiar las cosas desde fuera.21/22

Y es con las resisters que he conseguido tomar la decisión y encontrar un espacio de apoyo y complicidad primarista desde el que reconstruir. Magia en este caos. @alegreviajerx @sarabelinc @Mar_Sacristan @pati_dif_usa @BertaHerranz @ElenaBarahona @carmenfando @ClaraBenedicto. 22

La estatua de Agustín Lara con mascarilla, en la plaza de Arturo Barea. Foto Mar Núñez
Alguien le ha puesto mascarilla a la estatua de Agustín Lara, en la plaza que antes llevó su nombre y hoy el de Arturo Barea. Foto Mar Núñez 24 septiembre 2020.